Mi vida con el teatro

Esperando la carroza 2012

"Desde que te conocí, fuiste lo mejor para mi" ♫ 

Hace 7 años comenzaba una aventura totalmente distinta a las que ya había vivido, esa aventura se llamaba "La vereda de enfrente", no sabía si eso significaría mucho para mi, o solo sería un pasatiempo más. Al tiempo me di cuenta que no, que era algo muy valioso y no quería dejarlo ir por nada del mundo. Gente distinta, con diferentes pensamientos, ideas, gente entregada al escenario, otras menos. Es cierto que la primera vez al subirme al escenario tuve un poco de miedo, ojos que me miraban esperando algo de mi y yo queriendo satisfacer sus necesidad, costó! pero salió. Y una vez que salió me juré nunca más volver a bajarme del escenario. Y después llegaron más grupos, más obras, más escenarios, pero el sentimiento, era el mismo y cada vez más intento.
Me llena, me hace feliz, me hace viajar hacia otros mundos, mejores, peores, fantasiosos, emocionantes... Es difícil de explicar, es difícil poder poner en palabras la emoción que me provoca cuando digo la palabra Teatro, mezcla de felicidad, con lágrimas en los ojos, cosquillas en la panza, nervios, es eso y mucho más todo junto. Si hoy en día me tendrían que sacar algo, pediría que por favor no me saquen el teatro, no me saquen esas ganas de vivir, de vivir mi realidad ahí arriba, de compartir miradas, risas, llantos, enojos, y todo lo que un actor vive ahí arriba, ese despliegue de emociones hermosas, de realidades, de fantasías. Por favor, no me lo saquen!
Quiero seguir sintiendo esas emociones que rodean todo mi cuerpo y mi alma, quiero escuchar esos aplausos, quiero poder decir Teatro y no dejar de emocionarme, quiero que mi amor hacia el crezca y crezca y nunca se muera. 
¡Gracias por aparecer en mi vida, gracias por hacerme sentir viva y gracias por dejarme seguir pisando escenarios y sobre todo gracias por llenarme el alma!